jueves, 25 de noviembre de 2010

¿Por qué hay tantas religiones?

Juan Pablo II respondió a esa pregunta. Aquí pongo una parte:

En el libro el Papa afirma que "en vez de sorprenderse de que la Providencia permita tal variedad de religiones, deberíamos más bien maravillarnos de los numerosos elementos comunes que se encuentran en ellas". Cristo vino al mundo para todos los pueblos, dice el Papa, "los ha redimido a todos y tiene ciertamente Sus caminos para llegar a cada uno de ellos, en la actual etapa escatológica de la historia de la salvación. De hecho, en aquellas regiones muchos lo aceptan y muchos más tienen en Él una fe implícita (cf. Hebreos 11,6)".
Respecto al Islam el Papa señala que "cualquiera que, conociendo el Antiguo y el Nuevo Testamento, lee el Corán, ve con claridad el proceso de reducción de la Divina Revelación que en él se lleva a cabo. Es imposible no advertir el alejamiento de lo que Dios ha dicho de Sí mismo, primero en el Antiguo Testamento por medio de los profetas y luego de modo definitivo en el Nuevo Testamento por medio de Su Hijo. Toda esa riqueza de la autorrevelación de Dios, que constituye el patrimonio del Antiguo y del Nuevo Testamento, en el islamismo ha sido de hecho abandonada.


"Sin embargo, prosigue el pontífice, la religiosidad de los musulmanes merece respeto. No se puede dejar de admirar, por ejemplo, su fidelidad a la oración. La imagen del creyente en Alá que, sin preocuparse ni del tiempo ni del sitio, se postra de rodillas y se sume en la oración, es un modelo para los confesores del verdadero Dios, en particular para aquellos cristianos que, desertando de sus maravillosas catedrales, rezan poco o no rezan en absoluto.

El Concilio ha llamado a la Iglesia al diálogo también con los seguidores del "Profeta", y la Iglesia procede a lo largo de este camino. Leemos en la "Nostra aetate": "Si en el transcurso de los siglos no pocas desavenencias y enemistades surgieron entre cristianos y musulmanes, el Sacrosanto Concilio exhorta a todos a olvidar el pasado y a ejercitar sinceramente la mutua comprensión, además de a defender y promover juntos, para todos los hombres, la justicia social, los valores morales, la paz y la libertad" (n. 3)"

Por lo que respecta al Judaísmo, Juan Pablo II sostiene que "las palabras de la "Nostra aetate" suponen un verdadero cambio. El Concilio dice: "La Iglesia de Cristo reconoce que, efectivamente, los comienzos de su fe y de su elección se encuentran ya, según el misterio divino de salvación, en los Patriarcas, Moisés y los Profetas. [...] Por eso, la Iglesia no puede olvidar que ha recibido la revelación del Antiguo Testamento por medio de aquel pueblo con el que Dios, en su inefable misericordia, se dignó sellar la Alianza Antigua, y que se nutre de la raíz del buen olivo en el que han sido injertados los ramos del olivo silvestre que son los gentiles. [...] Por consiguiente, siendo tan grande el patrimonio espiritual común a los cristianos y a los hebreos, este Sacro Concilio quiere promover y recomendar entre ellos el mutuo conocimiento y estima, que se consigue sobre todo por medio de los estudios bíblicos y de un fraterno diálogo" (n. 4)".
"Tras las palabras de la declaración conciliar está la experiencia de muchos hombres, tanto judíos como cristianos. Está también mi experiencia personal desde los primerísimos años de mi vida en mi ciudad natal. Recuerdo sobre todo la escuela elemental de Wadowice, en la que, en mi clase, al menos una cuarta parte de los alumnos estaba compuesta por chicos judíos. Y quiero ahora mencionar mi amistad, en aquellos tiempos escolares, con uno de ellos, Jerzy Kluger. Amistad que ha continuado desde los bancos de la escuela hasta hoy. Tengo viva ante mis ojos la imagen de los judíos que cada sábado se dirigían a la sinagoga, situada detrás de nuestro gimnasio. Ambos grupos religiosos, católicos y judíos, estaban unidos, supongo, por la conciencia de estar rezando al mismo Dios. A pesar de la diversidad de lenguaje, las oraciones en la iglesia y en la sinagoga estaban basadas, en considerable medida, en los mismos textos" [...].


Sí queréis saber más, ir a esta página: http://www.mercaba.org/Fichas/Zenit/juan_pablo_ii_responde_a_.htm

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Jornada mundialde la juventud.

¿Qué es?
La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) es un evento organizado por la Iglesia Católica para reunir a los jóvenes católicos de todo el mundo.
La Jornada Mundial de la Juventud se realiza anualmente en cada
diócesis del mundo el día de Domingo de Ramos, con una ceremonia principal en el Vaticano. Sin embargo, cada dos o tres años, se realiza un gran encuentro internacional realizado en una ciudad sede. Esta ceremonia es presidida por el Papa. Este último encuentro, de varios días de duración, es el que se asocia habitualmente con el nombre de Jornada Mundial de la Juventud.
Este concepto nació en
1984 durante el papado de Juan Pablo II para incentivar la participación juvenil en la Iglesia y ha tenido gran éxito. En 1995, cuando el evento fue realizado en Manila (Filipinas), asistieron más de 5 millones de personas.
En
1997, la Jornada Mundial dio un cambio transformándose en un festival para la juventud con una duración de tres días antes de la ceremonia final.
Programa para el día 16 de agosto
Festival de la Juventud A lo largo de todo el día se celebrarán diversas actividades del Programa Cultural de la JMJ, cuando no coincidan con los actos principales de la JMJ. Este plan incluye conciertos, exposiciones, muestras, visitas guiadas a museos, obras de teatro, y un largo etcétera. El programa se dará a conocer más adelante, cuando se cierren todas las propuestas recibidas.
08:00Llegada a MadridDesde primera hora de la mañana, los peregrinos y grupos inscritos en la JMJ podrán recoger sus acreditaciones y mochilas en los lugares indicados por la organización. 19:00Misa de Inaguración JMJ La Jornada Mundial inicia a las 19h (hora provisional) con una Misa en la plaza de la Cibeles de Madrid, presidida por el arzobispo de Madrid y concelebrada por los obispos y sacerdotes que participan en la JMJ

miércoles, 17 de noviembre de 2010

¿Cuál es la religión verdadera?

¿Cuál es la religión verdadera? ¿Por qué?


La verdadera es la religión católica. ¿Por qué? Porque es la única religión fundada por Dios mismo. Así de simple y sencillo. Todas las demás religiones, monoteístas y politeístas, cristianas y no-cristianas, anteriores y posteriores a Cristo, han sido fundadas por hombres, no por Dios.


Hay personas buenas y sinceras en todas las religiones, pero la buena intención no puede cambiar la Verdad. En realidad, en cada religión hay verdades parciales ... además de muchos errores, sobre todo en algunas ... pero la plenitud de la Verdad, la Verdad completa, está en la religión Católica. Además, la Verdad es una sola y lo que es contrario a la Verdad no es Verdad.


No quiere decir esto que sólo los Católicos y todos los Católicos se salvarán. Dios premiará o castigará a todos, Católicos y no-Católicos, según su Misericordia y su Justicia, que son infinitas.


Fuera de la Católica, todas las religiones y/o sectas han sido inventadas por hombres. Se escapa a este criterio el Judaísmo, que es una religión revelada por Dios, pero que aun está esperando el Mesías prometido, pues no cree que Jesucristo es Dios, y aunque creen en el Antiguo Testamento de la Biblia como Palabra inspirada por Dios, pasan por alto las profecías que sobre Jesús están allí y que se cumplieron ya.


La otra religión monoteísta (un solo Dios) es el Islam, fundada por Mahoma, tampoco cree que Jesucristo es Dios, sino un profeta inferior a Mahoma. Sin embargo, el dios del Islam no es el Dios Amor del Cristianismo, origen de todo amor, que ama a los seres humanos independientemente de si le aman o no. Según el Corán, el dios del Islam ama condicionalmente: ama a quien lo ama y lo siga, y no ama a quien no lo ame. “En verdad Alá es enemigo de los incrédulos ... Alá ama a los benefacientes” (Corán, II-92 y 191).


Las religiones no-teístas, que no rinden culto a ninguna divinidad, fueron también fundadas por hombres: Budismo (por Buda), Confucionismo (por Confucio). Y las politeístas, que creen que hay, no una, sino varias divinidades, como el Hinduismo y Shintoismo, aunque no tienen fundador específico, son de origen humano. Y entre las sectas modernas politeístas: el Mormonismo, fundada por Joseph Smith.


De allí que sea la Iglesia Católica la única que puede trazar su historia, sin interrupción, desde el primer Papa, San Pedro, designado por Jesucristo, su Fundador, hasta el Papa actual.

Así fue como Jesucristo creó su única iglesia.

miércoles, 10 de noviembre de 2010


TRES TEMPLOS













  • Sinagoga. La sinagoga es la asamblea de fieles judíos y el lugar de culto y estudios de la más antigua de las religiones monoteístas.






La Sinagoga del Tránsito de la ciudad de Toledo, es el nombre popular con el que se conoce a la Sinagoga de Samuel ha-Leví, y es una de las muestras más importantes del arte hispanojudío. Fue construida en el siglo XIV y está adornada con elementos mudéjares y bellos motivos geométricos, florales e inscripciones árabes y hebreas. Actualmente alberga el Museo Sefardí que cuenta con importantes de vestigios de la cultura judía. Se celebraba el sábado.























  • Iglesia. La Iglesia sería el conjunto de todos los cristianos, congregados en virtud del bautismo. En la mayoría de denominaciones se cree que todos los bautizados conforman una sólo cuerpo con Cristo a la cabeza: la Iglesia entonces el cuerpo místico de Cristo. Se celebra el domingo, día en que Cristo resucitó.




Basílica de la Macarena, en Sevilla. fue construida por Aurelio Gómez Millán entre 1941 y 1949. Su fachada exterior tiene forma de arco y en su hornacina se representan alegorías a la esperanza y a la pureza de María. Muestra una réplica de la corona de la Virgen y efigies de los titulares de la hermandad. Cerrado este arco por una reja de forja.Formada por una sola nave con cubierta en forma de bóveda de cañón. En su interior encontramos el retablo mayor donde se aloja la figura de la Virgen. Cuatro capillas laterales acompañan este retablo.






  • Mezquita. Una mezquita es un lugar de culto para los seguidores de la fe islámica. El propósito principal de la mezquita es servir de lugar donde los musulmanes puedan reunirse para rezar. Si bien hoy en día no son sólo conocidas en todo el mundo por su importancia general para la comunidad musulmana sino también como muestras de la arquitectura islámica.

Mezquita de Córdoba. El edificio, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad junto con el centro histórico de Córdoba, se comenzó a construir en el 786 en el lugar que ocupaba la basílica visigótica de San Vicente Mártir. En 1238, tras la Reconquista, se llevó a cabo la conversión de la mezquita en una catedral cristiana con la ordenación episcopal de su primer obispo, Lope de Fitero. Es uno de los espacios turísticos más visitados y se le ha considerado el primero de los 12 Tesoros de España.






jueves, 4 de noviembre de 2010

Alcalá de Henares

TRES RELIGIONES,UNA CULURA

-Barrio Cristiano: El barrio cristiano estaba situado al sur-este del conjunto palatino y en los alrededores de la iglesia de los Santos Justo y Pastor. De aquí partían radialmente las principales calles de la villa que finalizaban en las puertas y postigos de la muralla. Las restantes calles secundarias, más conocidas por "las traviesas", se disponían entrecruzadas, cual tela de araña. De esta forma el núcleo del Burgo de San Justo quedaba definido por la iglesia de los Santos Niños en su centro y rodeada ésta por una serie de ensanches angostos a modo de tacones.

Sus casas no se diferenciaban del resto de las de otras comunidades, siendo lo más frecuente que fuesen de una sola planta, o a lo sumo de dos, como lo demuestran los restos de alguna todavía existente. En ellas eran frecuentes el uso de aleros de madera, algunos de gran belleza, lo que indica no sólo buen gusto, sino también la proyección económica y la distinción social por parte de sus ocupantes. Igualmente, la mayoría de las casas contaba con uno o dos patios que contenían pozo y pila.

-Barrio judío: La comunidad judía vivía entre las calles de Santiago y la calle Colegios, teniendo como eje central la calle Mayor. Por el oeste llegaban hasta la plaza del Mercado.

Los judíos se sitúan en la aljama situada prioritariamente en la calle Mayor, con sus numerosos adarves (calles o callejuelas sin salida, que desembocan en un corral o patio de vecindad), extendiéndose por las calles secundarias donde ejercían sus actividades mercantiles y financieras de todo género. La judería abarca una zona en forma de cuadrilátero, incluyendo la cabecera inmediata de las calles de Escritorios, la totalidad de la calle Mayor, como ya quedó dicho, y parte de la de Santiago, y cuyo límite podía decirse que estaba en la calle Segovia, hoy desaparecida, que unía las citadas calles con la puerta de Burgos.

Los judíos, sobre todo los que vivían en la calle Mayor, se dedicaban al comercio, sus casas eran de dos plantas, en la planta baja tenían la tienda y en la parte superior su vivienda. La estructura soportalada de la calle, les permitía sacar sus mercancías a la vista del público y al mismo tiempo protegerlas de las inclemencias del tiempo. Un barrio lleno del colorido de las telas y artesanías.

-El barrio musulmán: El barrio de la morería se ubica en la parte norte de la ciudad, entre las puertas de Burgos y de Santiago; al este limita con el Palacio Arzobispal. También en la Cruz Verde encontramos árabes. La calle Santiago, llamada entonces de la morería, marcaba la separación con el barrio de la judería.

En Alcalá, en el año 1305, se puede decir que vivían entre 80 y 130 musulmanes. La población mudéjar en nuestra ciudad a principios de la Edad Moderna era aproximadamente de 300 habitantes.

El barrio de la Almanxara *, compuesto de calles con corrales-adarves *. Su trama urbana y sus caseríos, no se diferenciaban mucho de los de los judíos o de los de los cristianos, aunque dado que sus oficios más frecuentes eran los oficios artesanales y las labores agropecuarias, sus casas no alcanzaban tanta altura como las de los otros dos grupos antes mencionados, sino que ganarían en extensión superficial para así poder colmar las necesidades de la vivienda: corrales para el ganado, almacenes para los aperos de labranza y herramientas, así como también graneros para los cereales y frutas.